Las mesas de centro son un elemento básico del salón. Lejos de ser un actor secundario, tiene un papel principal en tu salón, y va a ser uno de los muebles más útiles en tu día a día. A nivel estético, ocupa un lugar muy relevante en el conjunto de la zona de sofás que, en nuestra opinión, nunca ha de quedar vacío. Evitarás así la sensación de que la zona está incompleta. Pero, además de ayudar a armonizar visualmente ese espacio, es una pieza muy funcional. Si tienes la disposición de los sofás orientada hacia el televisor, te va a dar mucho juego como mesa informal de comedor, sobre todo a la hora de la cena, que es cuando suele estar la familia al completo. Aunque no hace falta ver la tele. Puedes igualmente usarla para para poner cosas de picar, merendar y tomar un café o una copa en reuniones de amigos, por ejemplo.
Una vez que ya tenemos clara su importancia, vamos a ayudarte a elegir la que
mejor se adapte a tus necesidades. Lo primero a tener en cuenta es su tamaño. Es recomendable que la altura sea similar a la de los asientos que la rodean. Si es demasiado baja o alta, no cumplirá bien su función. También es importante que haya una separación adecuada con respecto a los sofás para que no entorpezca el acceso y podamos estar sentados cómodamente. Pero atención, tampoco ha de estar demasiado alejada. Ten además en cuenta la longitud. Para que quede bien en el plano espacial, suele aconsejarse que tenga más o menos la mitad del sofá de más plazas. Un último aspecto a tener en cuenta es su separación con respecto al televisor. Lo ideal es que no sea inferior a un metro, aunque esta distancia deberá ser mayor si la zona es de paso.
Dicho todo esto, te sugerimos a continuación varias posibilidades:
- Mesas de centro gemelas. A nivel estético quedan muy bien y a nivel práctico te permitirá moverlas en función de las necesidades del momento.
- Transparentes. Que la tapa sea tipo cristal ayuda mucho a descongestionar el espacio en los salones que no son muy grandes, aunque en muchas ocasiones se elige este material por motivos puramente estéticos por el efecto limpio y sencillo que proyecta en el conjunto. Depende del modelo y de tus preferencias, el diseño de las patas o el pie central pueden aportar un determinado estilo -moderno, vintage, rústico o clásico, por ejemplo- para que no sea un elemento excesivamente simple.
- Redondas. La forma también es importante. Evitar los picos es una posibilidad que te aconsejamos tengas en cuenta. Facilita bordear su superficie sin incómodos golpes. Son ideales en salones pequeños.
- Cuadradas o rectangulares. Suelen ser las más demandadas. Es una forma que encaja bien con la zona de sofás debido a la armonía visual que consiguen las rectas con su capacidad de crear líneas paralelas con los sofás, el mueble del salón o las paredes. La sensación de orden que consigue es muy recomendable.
- Elevables. Este tipo de mesa permite regular la altura para adaptase a su uso. La comodidad y versatilidad son sus principales puntos fuertes.
- Con compartimentos. Si tienes claro que nunca está de más contar con espacios que te permitan guardar cosas y mantener el orden, no dudes en escoger un modelo que incorpore elementos que te permitan el almacenaje. Aunque no sean muy grandes, todo suma. Una idea: plantéate la posibilidad de colocar un arcón como mesa de centro. Decora, y prestará a la perfección su doble función.
Un último consejo: elige los materiales que mejor combinen con el estilo de tu salón. Aquí las posibilidades también son muy grandes. Normalmente la madera está presente en mayor o menor medida, pero hay quien elige romper la costumbre y apostar por la forja, cristal o la piedra. En Muebles La Factoría, nuestro equipo de asesores en mobiliario y decoración te dará ideas y te ayudará a elegir la mesa de centro perfecta para tu hogar. Visítanos en la tienda más cercana a ti.